Varias claves de Robert Pratten para el empleo de Twitter como elemento narrativo. Consciente de la brevedad de la herramienta, se centra en la idea de que cada herramienta debe aportar su fortaleza y rechaza la idea de que se trata de cada twit sea «una página» de una historia. Recomienda entenderlo como un arma para incitar a la participación y construir audiencia: crear escenarios que inviten a la conversación y que abran las puertas al seguidor a la historia, asumir que se trata de un espacio de descubrimiento y exploración y emplearlas para amplificar el mundo de la historia a través de varios streams de conversaciones.
La descripción surge como respuesta a un artículo en Silverstring Media con una amplia recopilación de las formas en que se puede y se ha usado Twitter para contar historias donde se insiste en la idea de barreras de entrada como uno de los problemas más serios de una narración transmediática: ¿cómo ponerse al día de la historia si se accede a ella cuando ya lleva meses desde su nacimiento?. Las características de Twitter hacen esta cuestión más ardua. La respuesta de Pratten es plantearlo, como hemos dicho, en un espacio de descubrimiento y no esencial para seguir la historia.